En un giro diplomático inesperado, la presencia de Donald Trump en el G‑7 se vio truncada por la crisis en Oriente Próximo —lo que provocó la cancelación de su reunión con la presidenta de México, Claudia Sheinbaum—, pero no por falta de voluntad. Tras su regreso anticipado a Washington, ambos líderes acordaron respirar y retomar el diálogo… vía telefónica.
¿Por qué se canceló el cara a cara?
La salida precipitada de Trump de la cumbre en Canadá obedeció a la escalada del conflicto entre Irán e Israel. Según la Casa Blanca, el presidente suspendió todas sus bilaterales —entre ellas la esperada con Sheinbaum— para atender asuntos de seguridad nacional.
Una llamada que reemplaza un encuentro
Desde Palacio Nacional se anunció que, aunque no había una nueva fecha para el encuentro presencial, se realizaría una llamada. La secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, confirmó que “el diálogo bilateral sigue abierto” y que la suspensión del encuentro no impacta las relaciones entre ambos países.
¿Qué se comentaron?
Aunque los detalles no se han hecho públicos, se espera que la conversación haya abordado los temas clave originalmente en la agenda: migración, impuesto a remesas, seguridad fronteriza y comercio. Sheinbaum tenía previsto plantear su preocupación por las redadas a migrantes y la propuesta de gravar las remesas.
Diplomacia con estilo mexicano
Quien planeó la reunión es una experta en el diálogo, y Sheinbaum ha dejado claro que busca una relación firme, pero con respeto mutuo. Antes de partir, ella misma había dicho que “vamos a defender a los mexicanos… siempre con diálogo y buscando acuerdos”.
¿Y ahora qué sigue?
El diálogo entre México y Estados Unidos continúa fluyendo por canales oficiales, incluyendo esta llamada. La expectativa es que pronto se reprograme la reunión personal, quizá en territorio estadounidense o en otro foro internacional. Mientras tanto, Sheinbaum sigue en Canadá atendiendo la agenda del G‑7, reuniéndose con líderes de Canadá, Alemania, India y la Unión Europea.
Trump canceló su visita a la reunión bilateral debido a la tensión internacional, pero no cortó la comunicación: se concretó una llamada telefónica para dar seguimiento a temas vitales para México. Aunque pospuesta, la reunión podría reagendarse en breve.