Ciudad de México, 18 de junio de 2025 — Durante la conferencia matutina de este miércoles, la presidenta Claudia Sheinbaum compartió detalles de la llamada telefónica que sostuvo con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, luego de que se cancelara el encuentro bilateral previsto en el marco de la Cumbre del G7.
El motivo de la cancelación, explicó Sheinbaum, fue la salida anticipada de Trump de la cumbre debido a la situación en Medio Oriente. A pesar de ello, ambos mandatarios sostuvieron una conversación telefónica de 20 minutos, en la cual abordaron temas clave para la relación bilateral: seguridad, migración y comercio.
“Le planteé la importancia de reconocer a las familias mexicanas que viven y trabajan en Estados Unidos desde hace años. Él reconoció que muchas de ellas contribuyen al bienestar de su país”, relató la mandataria. Según Sheinbaum, el republicano incluso se disculpó por haber tenido que cancelar la reunión presencial y sugirió la posibilidad de que la presidenta mexicana hiciera una escala en Washington a su regreso. “Le dije que no lo tenía planeado, pero que habría otras oportunidades”, respondió ella.
Uno de los puntos centrales de la llamada fue la propuesta de un acuerdo general trilateral, que abarque temas de seguridad, migración y comercio, más allá de lo ya establecido en el T-MEC. “No se trata de una renegociación del tratado comercial, sino de un acuerdo complementario que permita una coordinación más estrecha, respetando nuestras soberanías”, aclaró Sheinbaum.
Sobre migración, destacó que los flujos irregulares a través de México han disminuido significativamente, y planteó que cualquier acuerdo en esta materia debe incluir el respeto y la integración de las familias mexicanas que viven en Estados Unidos.
En cuanto al seguimiento de estos temas, informó que este viernes el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, se reunirá en Washington con el secretario de Comercio estadounidense, Howard Lutnick, para avanzar en los temas comerciales pendientes.
Sheinbaum también aprovechó para criticar a sectores de la oposición que intentaron politizar la cancelación de la reunión bilateral, señalando que los motivos estuvieron completamente fuera del control del gobierno mexicano.
Con esta conversación, la mandataria mexicana dejó claro que mantiene abierta la vía del diálogo con Washington y que la defensa de las familias mexicanas en Estados Unidos será un eje fundamental en las negociaciones con el gobierno de Trump.