Washington D.C., 18 de junio de 2025 – El presidente de EE. UU., Donald Trump, anunció hoy que su propósito en el actual conflicto Irán–Israel no es alcanzar un alto al fuego, sino lograr una victoria total y completa, con el objetivo de impedir que Irán obtenga un arma nuclear.
Durante su regreso anticipado desde la cumbre del G7 en Canadá, Trump afirmó desde el Air Force One: “No estoy buscando un cese de hostilidades, estamos buscando algo mejor que eso”.
Según el mandatario, lo que busca no es sólo frenar los enfrentamientos, sino forzar a Irán a una rendición incondicional, renunciando totalmente a su supuesto programa de enriquecimiento de uranio. Instó a Teherán a “ceder completamente” y puso como condición para cualquier solución definitiva que abandonen por completo el supuesto desarrollo nuclear iraní.
En las propias palabras de Trump: “Queremos una victoria total y completa. ¿Sabes cuál es la victoria? Ninguna arma nuclear”.
Además, alertó de que la paciencia de EE. UU. se está agotando y advirtió sobre consecuencias aún más severas si Irán no accede a la rendición total .
¿Qué busca Trump realmente?
- Eliminar capacidad nuclear iraní de forma definitiva
Su objetivo es claro: destruir cualquier posibilidad de que Irán desarrolle armas nucleares. Para eso exige un desarme completo del programa de enriquecimiento de uranio. - Presionar diplomáticamente sin ceder terreno
Rechaza los términos convencionales de un alto el fuego, afirmando que busca algo “mejor” y más definitivo: una rendición incondicional de Irán. - Mantener la opción militar sobre la mesa
Aunque aún no ha ordenado ataques directos de EE. UU., su retórica sugiere que se mantiene una política agresiva. Para ese fin Estados Unidos continúa utilizando a Israel quien debe continuar su ofensiva. EE. UU. Sólo podría intervenir si Irán no se detiene. - Actualizar su narrativa de “rendición total”
Trump ha cambiado su discurso de “alto el fuego” a “rendición incondicional”, alineándose con sectores de línea dura tanto en EE. UU. como en Israel .
En resumen, Trump no pretende un cese temporal de hostilidades. Su meta es presionar diplomática y militarmente hasta que Irán abandone por completo su programa nuclear. No sólo busca desactivar una amenaza percibida, sino cambiar el curso de la diplomacia regional con una demanda de rendición incondicional.